Las cosas de la vida! Hoy coinciden los cumpleaños de Mamá y de Pablo.
A ambos los extraño y ambos me duelen en el
recuerdo, en el recuerdo cotidiano.
Mamá, siempre sonriente, paño de lagrimas de
todos nosotros, pararrayo emocional amoroso y cofre encantado de conocimientos,
su partida hace mas de cuatro años me dejó un hueco que, confieso, no he podido llenar
de nuevo.
Me hace falta su calor humano, su indignación lacerante
y justa, su risa como cascabel que derramaba generosa, su consejo de madre,
sobre todo aquella frase que repetía siempre "Amor no quita conocimiento."
Cuando escribo esto el corazón busca
saltar por la boca y se me anuda en la garganta y las lágrimas luchan por salir
y gritar en el aire: ¡Te extraño tanto!
Pablo, se fue de repente como del rayo, y el sentimiento es tanto, que
escribirlo no ayuda mucho, pero alivia. Soñador, erudito, mago de luz
iridiscente atrapada con el lente, Arquitecto y pensador y sobre todas las cosa
mi Amigo.
Para ambos, allá en su Estrella, donde quiera
que esté, va este PeNéLopE de tristeza y alegría.
Omar
